Haiti has collapsed. The President is no longer in the country. The ports are officially closed. Cannibal gangs are besieging the national palace in Port-au-Prince. pic.twitter.com/xm2T5Scc5o
— Ian Miles Cheong (@stillgray) March 10, 2024
Elon Musk replicó: "Fin de los días. Esto es más sombrío que Mad Max".
Pronto, las noticias llegaron hasta el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, que más tarde compartió un vídeo —ahora eliminado en la red social, pero que aún puede encontrarse en internet si uno se pone a ello— de un supuesto pandillero haitiano arrancando y mordiendo trozos de carne de un cadáver chamuscado.
Su veracidad también ha sido cuestionada. La fuente última es un canal francés de Telegram cuya bio reza "tu dosis diaria de conspiración: cuidado, muchas 'fake news' y muchas verdades". No se sabe si el citado vídeo [precaución: contenido explícito y probablemente falso] pertenece a Haití o a un país francófono africano en situación conflictiva. Lo que sí es comprobable es que no está relacionado con la actual situación en el país caribeño, ya que el video tiene, como poco, varios meses de antigüedad.
"Vimos imágenes similares en El Salvador hace unos años", tuiteó Bukele. "Pandillas bañándose con los cráneos de sus víctimas. Todos los 'expertos' dijeron que no podían ser derrotados, porque eran una 'parte intrínseca de nuestra sociedad'. Estaban equivocados. Los aniquilamos".
Otros usuarios compartieron otro vídeo con el mensaje "los haitianos disfrutan de la carne humana" que, en realidad, pertenecía a una película nigeriana de 2018.
Otro de los que se viralizó mostraba a un cadáver atado a un poste que daba vueltas sobre unas brasas, pero se trataba realmente de una atracción de dudoso gusto realizada en el parque temático Chimelong Ocean Kingdom (Zhuhai, China) para el Halloween de 2018. Hace meses, la imagen sirvió para crear otra 'fake news' de que había un restaurante nigeriano sirviendo carne humana.
Para quien haya encontrado de forma casual alguno de estos contenidos en sus redes sociales, la conclusión es clara. La situación en Haiti es tan grave que ha degenerado en la práctica más abominable. Los caníbales campan a sus anchas.
El contexto
Haití nunca ha estado bien, pero la situación es especialmente complicada desde que, en julio de 2021, el presidente del país Jovenel Moïse fuera asesinado. Su sucesor, Ariel Henry, ha sido el interino hasta la semana pasada, cuando tuvo que dimitir y huir a Puerto Rico, desde donde anunció que un consejo de transición pilotará el país hacia la convocatoria de unas nuevas elecciones. Entre el asesinato de uno y la huida del otro, lo que ha sucedido es que las pandillas han comenzado a organizarse y, a principios de marzo, provocaron la evasión de casi 3.700 presos de la Penitenciaría Nacional de Puerto Príncipe.
Cuando el 1 de enero expiró el mandato de los parlamentarios sin tener elecciones a la vista, Jimmy Cherizier alias Barbecue logró unir a varias pandillas e imponerse a las debilitadas fuerzas del orden y ejército haitianos. Según datos de Naciones Unidas, actualmente controlan el 80% de la capital del país. Cherizier es la persona a la que se atribuye el asalto a la Penitenciaria Nacional y quien amenazó con una guerra civil en el país si Henry no dimitía.
Dos días después del ataque a la prisión, el periódico estadounidense The Express publica un artículo citando a un periodista local anónimo que dice: "El canibalismo no está muy extendido, pero sin duda es un indicio del empeoramiento de la situación. Sin duda ocurre en algunas ocasiones". Esta es la base sobre la que comenzó a construirse esta narrativa. El autor, Charlie Bradley, es un periodista que escribe sobre política estadounidense en este y otros medios del grupo Reach, editor de, fundamentalmente, tabloides como el Daily Mirror. Aquel día, además de esta historia, Bradley publicó otros cuatro artículos sobre el plan de Rusia y China de construir una planta nuclear en la Luna, la caída de Instagram antes del Supermartes electoral o las críticas de Elon Musk a los "eco-terroristas idiotas" que atacaron una fábrica de Tesla en Alemania.
Paralelamente a esto, la crisis humanitaria que está provocando esta insurrección ha provocado un choque de trenes en Washington. Biden presiona al Congreso para que aprueben un plan de 40 millones de dólares que enviaría a mil policías desde Kenia a Haití para contener la situación. Este descabellado plan cuenta con el aval de la ONU, pero fue declarado inconstitucional por el Tribunal Supremo en Nairobi. Si la escalada continúa, la oleada de inmigrantes haitianos a Estados Unidos podría desbordar las previsiones.
De ahí reacciones como las de Elon Musk, quien estos días ha sugerido la idea de "examinar a los inmigrantes en busca de posibles tendencias homicidas o canibalismo".
If wanting to screen immigrants for potential homicidal tendencies and cannibalism makes me "right wing", then I would gladly accept such a label!Failure to do so would put innocent Americans in mortal risk.Shame on NBC. Shame, shame, shame.
— Elon Musk (@elonmusk) March 13, 2024
Un país caribeño al borde de la guerra civil y Estados Unidos a punto de entrar en la carrera electoral, los dos ingredientes con los que se ha cocinado un cóctel explosivo para los soldados de la guerra cultural. Pero en este caso, que el trasfondo sea el canibalismo en Haití no es una novedad; más bien, una tradición.
El canibalismo en la batalla cultural
La tensión entre Estados Unidos y Haití se remonta al siglo XIX, prácticamente al momento en que el país logró la independencia y los esclavistas norteamericanos temieron que aquello pudiera derivar en una revuelta de los esclavos en otras regiones. Entre 1915 y 1934, Estados Unidos ocupó Haití como una forma de controlar su política y sus finanzas y garantizar que empresas estadounidenses pudieran dominar el país. En aquella época visitó el país William Seabrook, un antropólogo obsesionado con la cultura del país colonizado que plasmó en el libro La isla mágica (1929) muchos de los mitos sobre el vudú y el canibalismo que alimentaron los prejucios sobre Haití que circularon en los periódicos sensacionalistas durante las décadas posteriores.
Esta mistificación, según algunos autores, tuvo el efecto de deshumanizar a los habitantes de la isla, representados como zombis sin voluntad sedientos de sangre, y ayudó a justificar la explotación del país por parte de los estadounidenses, obligados a permanecer en Haití para proteger a sus habitantes de los bokor, sacerdotes satánicos que pretendían profanar sus cuerpos para convertirlos en animales.
A decir verdad, nada de esto era una invención de Seabrook, sino parte del folklore tradicional de la isla. Claramente, el antropólogo tuvo algún problema con la traducción literal de lo que le contaron.
Como escribió en 1959 la antropóloga Erika Bourguignon, cuando alguien enfermaba, se solía creer que era una maldición de los dioses, que "se comían" a la víctima. Es decir, se veía a la persona muerta como "devorada" por la deidad a través del sacerdote, que en ocasiones sacrificaba a algún animal para representar al enfermo, que fallecía poco después. Los haitianos usaban para ello una expresión, mangé moun, que literalmente significaba "comer hombres", pero tenía varias acepciones más. "Sin embargo, cuando se afirma que la gente es asesinada y "devorada" por entidades malignas, está claro que no existe base para decir que el canibalismo y el sacrificio humano, como suelen entenderse comúnmente, existan en realidad en Haití", expuso Bourguignon.
Lo que hacen ahora Elon Musk o los influencers republicanos es lo mismo que hacían los panfletos anti-inmigración en los años 30 y lo mismo que hacían los colonizadores franceses o españoles hace varios siglos.
Hace más de 50 años, Richard B. Moore, una eminencia en los estudios afro-caribeños, reflejaba cómo "durante casi cinco siglos, el estereotipo del canibalismo voraz, impuesto al pueblo caribeño por los colonizadores europeos invasores, ha sido ampliamente aceptado y transmitido como un hecho histórico", dijo en este artículo de 1973. "Este estereotipo ha sido adoptado y utilizado incluso por la mayoría de estudiantes, profesores, académicos y científicos".
Moore recordaba un viejo cartel que había colgado en el Astillero de Nelson, que los ingleses construyeron en la capital de Antigua y Barbuda. Decía así: "Los caribes, a diferencia de los arahuacos del norte, eran feroces luchadores y caníbales. Han probado a todas las naciones que los frecuentaban, y afirman que los franceses son los más delicados y los españoles los más duros de digestión".
'Fake news' en mitad de la violencia
Una vez contextualizada esta narrativa resurgente, es hora de confrontar los hechos. En estos momentos, como en los últimos cuatro años, el país —que sigue lamiéndose las heridas de los terremotos de 2010, 2018 y 2021— vive sumido en una pesadilla. Violentos pandilleros han acaparado el vacío de poder y viven enfrentándose entre ellos o al menguante ejército haitiano. En este contexto de violencia extrema, es plausible que se hayan dado escenas en las que un cadáver haya sido descuartizado y alguien haya sugerido ante la cámara que alguien pretendía devorarlo.
Dan Cohen, periodista que ha hecho un documental sobre el terreno sobre Jimmy Cherizier, atribuye por ejemplo el vídeo que circulaba por Telegram a un enfrentamiento entre bandas en el valle del río Artibonito. El supuesto canibalismo habría sido una especie de teatralización con el objetivo de "aterrorizar a la población".
Un portavoz del Departamento de Estado norteamericano tuvo que salir esta semana a desmentir que hayan recibido algún informe creíble sobre canibalismo en Haití. Desde el terreno, organizaciones como Médicos Sin Fronteras o Human Rights Watch tampoco han visto evidencias en este sentido. Todas estas fuentes son muy cautelosas a la hora de emplear la palabra.
José Manuel Losada, catedrático en la Universidad Complutense de Madrid especializado en el estudio de la mitocrítica, traza una línea muy clara en este sentido: "La ingestión de seres humanos se inserta en el rito, no directamente en el mito, a condición de incluir algún tipo de referencia a la dimensión sobrenatural", indica. "Comer carne humana por odio, soberbia o vanidad no es ni rito ni mito: todo queda en el ámbito humano, social, sin ningún tipo de sacralidad". Es decir, a diferencia de lo que pasaba con la leyenda de los sacerdotes bokor, en estos casos sería más apropiado hablar de terrorismo que de canibalismo.
"Estamos en una sociedad que no se mueve por lo real, sino por lo irreal, lo fantástico, lo opinable y, sobre todo, por la emoción"
Particularmente en la dialéctica bélica de la guerra entre pandillas en Haití, el canibalismo claramente ocupa un lugar simbólico muy importante. Es una manera de infundir el terror sin parangón, de hecho una de las pandillas se bautizó como Cannibal Army: "No me llama la atención que el canibalismo tenga tanto poder; si se trata del canibalismo material —sin referencias sobrenaturales— produce espanto y amedrenta; de ahí su fascinación", reflexiona Losada. "Si se trata del canibalismo material y espiritual, evoca la posibilidad de adquirir fuerzas ocultas en los cuerpos comidos o ahuyentar espíritus malignos".
"Por otra parte, estamos en una sociedad que no se mueve por lo real, sino por lo irreal, lo fantástico, lo opinable y, sobre todo, por la emoción: no extraña que las fotos y los vídeos divulgados adquieran esa fortaleza", indica el catedrático. Para los guerrilleros, la leyenda de los caníbales salvajes cumple un papel; para gente como Cheong, Musk o Bukele, también.
]]>El pueblo se ha volcado una vez más a las calles por los apagones que han mantenido a oscuras un 50% de la isla en las últimas semanas. Una manifestante de la ciudad de Bayamo explicó al medio independiente Cubanet las causas de estas protestas: "Según ellos no hay combustible para producir energía, pero son barrios que llevan hasta tres y cuatro días sin corriente. Y entonces la gente protesta porque no puede cocinar, hay muchas personas que no tienen gas. La situación es bastante caótica. A los ancianos en sillas de ruedas los sacan a los portales de las casas para que no pasen calor y no los piquen los mosquitos".
En la mañana del domingo, antes de que comenzaran las protestas, el ministro cubano de Energía y Minas prometió que el lunes comenzaría a producir electricidad la planta más importante del país. Sin embargo, aclaró que la situación seguirá fluctuando en las próximas semanas, porque La Habana no tiene liquidez para financiar un suministro estable de combustible.
En medio de este huracán de escasez, el régimen cubano dio un paso inédito en 65 años de gestión comunista. Ante la incapacidad de entregar leche a los menores de siete años, solicitó por primera vez ayuda al Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la Organización de Naciones Unidas (ONU). ¿Qué significa esto para el régimen cubano?
El Gobierno de Miguel Díaz-Canel, presidente de Cuba, se ha visto acorralado ante la crisis alimenticia y la crispación en la isla. La solicitud de ayuda realizada podía haberse materializado mucho antes. Hace más de 30 años que en Cuba hay poca leche. Sin embargo, que La Habana decidiera romper su orgullo y dar este paso ahora, responde a un contexto extremadamente complicado para su economía. Un alimento imprescindible como el pan, por ejemplo, también se ha convertido en un lujo para muchos cubanos.
"Comida para los niños no hay nada. Esta semana dieron pan cinco días para los menores de 14 años. Para los mayores de 14 años dieron pan solo un día de la semana", dijo a El Confidencial Dayana Cabrera González, una madre del municipio Colón de la provincia de Matanzas. Una parte de los alimentos básicos que consumen los cubanos son distribuidos por el Gobierno a través de un sistema de comercio conocido como canasta básica. Fuera de ese entramado, clásico en países de Europa del Este durante sus gobiernos socialistas, es muy difícil conseguir alimentos como la leche. Y, cuando no se tiene nada, solo queda salir a la calle.
El juicio que desnuda la represión masiva en la nueva Cuba de Miguel Díaz-Canel
Daniel Iriarte
"¡Patria y Vida!"
Al igual que los apagones, las protestas continuaron el lunes, pero la gente también comenzó a pedir que no se continuara con la represión. Desde la noche del domingo comenzaron a trascender videos en los que agentes de la Policía prácticamente arrastraban por las calles de Bayamo a cubanos semidesnudos. Cuando los manifestantes detenidos en el poblado santiaguero de El Cobre iban a ser presumiblemente trasladados, una turba comenzó a forcejear con los policías en plena calle. Se trataba de un grupo de cubanos mayoritariamente negros, incluidas muchas mujeres, que le plantaron cara al poder desplegado por el régimen totalitario más antiguo del hemisferio occidental. La represión en la Cuba comunista siempre se ha ensañado con la población afrodescendiente.
Mientras en Bayamo y Santiago de Cuba los cubanos gritaban "¡Patria y Vida!" o "No queremos 'muela' (mentiras)", Miguel Díaz-Canel, el líder del Partido Comunista de Cuba (PCC), culpó del caos a Washington y ofreció un discurso seudoconciliador, cuando en realidad lo que hacía era desplegar todo su aparato represivo. "Varias personas han expresado su inconformidad con la situación del servicio eléctrico y la distribución de alimentos. Este contexto se intenta aprovechar por los enemigos de la Revolución (Gobierno de EEUU), con fines desestabilizadores", así encabezaba Díaz-Canel un hilo en la red social X.
Varias personas han expresado su inconformidad con la situación del servicio eléctrico y la distribución de alimentos.Este contexto se intenta aprovechar por los enemigos de la Revolución, con fines desestabilizadores.
— Miguel Díaz-Canel Bermúdez (@DiazCanelB) March 18, 2024
El cinismo del PCC no tiene límites: su líder reconoce que no puede garantizar ni alimentos ni electricidad, y culpa de ello a un gobierno extranjero. Vale recordar que la presencia de EEUU es muy limitada. Después de décadas de ruptura diplomática, reabrió su embajada en la isla hace menos de una década. El Gobierno de EEUU no tiene la capacidad real para "desestabilizar" desde adentro la sociedad cubana. Solo el exilio cubano, surgido y polarizado en gran medida por las políticas de La Habana, pudiera ayudar aún más al pueblo en un posible cambio real dentro de la isla.
El descaro del régimen también quedó manifiesto en un presunto interés de diálogo. "La disposición de las autoridades del Partido, el Estado y el Gobierno es atender los reclamos de nuestro pueblo, escuchar, dialogar, explicar las numerosas gestiones que se realizan para mejorar la situación, siempre en un ambiente de tranquilidad", añadió Díaz-Canel en su citada publicación.
Vender estas movilizaciones como reclamos circunstanciales y no como exigencias de cambio
Cierto es que la líder del PCC en Santiago de Cuba intentó intercambiar con los manifestantes, pero alejó de la política los cuestionamientos recibidos. La manipulación de los reclamos realizados da cuenta de la verdadera estrategia del régimen: vender estas movilizaciones como reclamos circunstanciales y no como exigencias de cambio.
El sistema de medios oficiales que financia y administra el PCC para garantizar su propaganda, también manipuló las manifestaciones y dijo que los policías "custodiaban a los participantes". Obviamente, estos medios no han informado de las cifras de detenidos que ya cotejan organizaciones independientes.
La última acción tomada por el régimen ha sido convocar al encargado de negocios de EEUU en Cuba (el principal diplomático de Washington en La Habana). En una extensa declaración de la Cancillería cubana, el Gobierno estadounidense ha sido acusado, sin pruebas vinculadas a estas manifestaciones, de "interferir en los asuntos internos" de la isla. Esta maniobra política responde a un patrón histórico del castrismo: justificar sus desastres con la política de embargo que mantiene el "imperialismo yanqui", su mayor enemigo.
Ahora, pese a su probada pericia para mantenerse en el poder, el régimen tendrá que driblar mucho y mejor para salir de este apuro. En Cuba están pasando cosas que, junto a la crisis alimentaria, han provocado recientes sismos en el poder.
El puesto de Díaz-Canel en peligro
Debido a la perenne escasez de la leche, el régimen se ve obligado a importar grandes volúmenes de leche en polvo. Pero la falta de liquidez financiera que ha mantenido a la isla en ruinas en los últimos años, ha truncado esas importaciones. Ahora ni siquiera los menores de siete años, los únicos que tenían leche asignada por las autoridades, pueden acceder a ella.
La errática política trazada por el Gobierno para el fomento ganadero y el acopio de leche, ha hundido las producciones a niveles incluso inferiores a los del Periodo Especial, la aguda crisis económica que enfrentó la isla en los años 90 tras la caída del campo socialista.
El economista cubano Pedro Monreal valoró la situación existente a raíz de la petición que realizó La Habana a la ONU: "La crisis con la producción nacional de leche no se debe a desastres naturales ni es simplemente una 'emergencia'. Refleja una política agropecuaria fallida y es una 'situación' estructural de largo plazo que no va a resolver el PMA".
Una de las cosas que más agobia a esta cubana de 33 años es la dieta de su hijo, quien ya perdió el derecho a consumir leche por haber cumplido siete años. "En la escuela del niño hay almuerzo con arroz de lunes a jueves, el viernes uno debe llevarle también el arroz. Pero todos los días hay que mandarlo con algo porque lo único que dan es arroz y chícharos. Él lleva dos cursos en la escuela y desde el principio me dijeron los jefes de ahí que no podían garantizar un plato fuerte", dijo Cabrera sobre la escuela de su hijo, la única que presta servicio de almuerzo en ese municipio.
El desayuno y la merienda del niño es otro dolor de cabeza para esta madre soltera. "Un pan particular (no producido por el Gobierno) vale más de 100 pesos (0,85 dólar según el cambio oficial). Todos los padres no tienen ese dinero. Yo si lo puedo pagar, pero es demasiado dinero a gastar todos los días. A veces, en vez de merienda le doy dinero para que se compre una pizza que vale 80 pesos. El curso pasado faltó el pan como una semana y una vecina mía no mandó a su hija ningún día de esos para la escuela", explicó Cabrera.
"Varias veces he ido a los puntos de venta particulares y tampoco tienen porque en la noche anterior no tuvieron electricidad para hornear"
Los cubanos ni siquiera pueden acceder regularmente al pan que produce el sector privado. "Con este tema de los apagones lo otro es que los panaderos no pueden hacer pan. Varias veces he ido a los puntos de venta particulares y tampoco tienen porque en la noche anterior no tuvieron electricidad para hornear", añadió esta cubana.
Los métodos para sobrevivir en Cuba se han ido complejizando en la misma proporción que la crisis múltiple que no logra aplacar el Gobierno. Por ejemplo, una odontóloga como Cabrera no puede vivir de su profesión porque desde el 2020 hay muy pocos insumos en las clínicas del Estado (únicas legales). Ella viaja con regularidad a La Habana para comprar cosas que luego revende en Colón. En su último viaje obtuvo muchos sobres de gelatina que luego le comprarían otras madres de su barrio para alimentar a sus hijos.
"Yo trabajo (como odontóloga) solo en las mañanas de dos días de la semana. Ahora no había ni guantes ni papel (imprescindible para resguardar el instrumental esterilizado), y prácticamente solo atendemos urgencias. Tampoco hay lo necesario para hacer empastes dentales. Si las personas no llevan sus propios recursos, es casi imposible atenderlas. Sin embargo, hace poco una jefa le dijo a una compañera mía que no podía utilizar cosas que llevaran los pacientes", detalló Cabrera sobre la precariedad que se vive dentro del sistema sanitario cubano.
El derrumbe de los servicios de Salud Pública en la isla quedó evidenciado en una encuesta de agosto de 2022 realizada por el proyecto independiente Cubadata. El 57,6% de los cubanos consultados consideraba imposible o muy difícil obtener atención médica, y el 80,3% tenía "mucha dificultad" para encontrar medicamentos.
Una isla a la fuga: "Es como vivir en una película de narcos y traficantes"
Alfredo Herrera Sánchez
La crisis migratoria cubana y el aumento de la inseguridad en las calles son otros síntomas de los malos tiempos que corren en la isla. Pero hay uno nuevo, y quizás más esperanzador, que expone una crisis política dentro del siempre monolítico poder del PCC. Se trata de la defenestración de Alejandro Gil Fernández, el ministro de Economía y Planificación que escogió el presidente Miguel Díaz-Canel en 2018, uno de los vice primeros ministros más activos dentro del Gobierno.
La salida de Gil fue anunciada junto a otras destituciones, y era más que entendible dada la pésima hoja de ruta que acumuló por encabezar sucesivas políticas que fracasaron. En X, Díaz-Canel se despidió a principios de febrero de quien fuera uno de sus más cercanos, y Gil devolvió el "entrañable" gesto. Un mes después, un mensaje firmado por Díaz-Canel anunció que Gil estaba siendo investigado por "graves errores cometidos".
Aunque no se precisaron las faltas ni su magnitud, Díaz-Canel aseguró que no permitirán "la proliferación de la corrupción, la simulación y la insensibilidad". Dado que ninguna investigación exprés podría generar tales acusaciones contra un funcionario de alto rango, y teniendo en cuenta la cercanía expresada poco antes por Díaz-Canel, algunos analistas cubanos aseguran que el proceso le fue ocultado al presidente. A pesar de que Díaz-Canel es el primer secretario del Comité Central del Partido Comunista, nonagenarios como Raúl Castro y Ramiro Valdés, quienes mantienen una agenda activa dentro del Gobierno y conservan un alto capital simbólico por haber luchado en la Sierra Maestra, podrían estar detrás de la defenestración de Gil.
En cualquier caso, este tipo de hechos se dan en Cuba cada mucho tiempo, y lo que se sabe de ellos es lo que al régimen cubano le interesa que se sepa. Por eso, otra lectura de la situación es que pretenden crear un chivo expiatorio, uno con el potencial de cargar con todas las penurias que ha tenido que enfrentar el cubano de a pie en los últimos años. Gil, por ejemplo, fue uno de los arquitectos de la dolarización de gran parte del comercio minorista en la isla, y su ministerio impulsó la eliminación del CUC (la moneda cubana que desapareció a inicios de 2021 durante la conocida como Tarea Ordenamiento).
De investigaciones similares desarrolladas por el régimen cubano contra uno de los suyos, como el caso del general Arnaldo Ochoa en 1989, o de Carlos Lage (vicepresidente) y Felipe Pérez Roque (canciller) en 2009, La Habana ha generado auténticos shows mediáticos para lavar su imagen. Ahora, el gran relevo de poder que el PCC forjó durante décadas en la figura de Díaz-Canel, pudiera estar en peligro tras la caída de Gil.
]]>Estas sanciones, que afectan a seis colonos frente a los 12 que inicialmente se habían discutido, llegan de la mano de nuevas medidas contra tres terroristas de Hamás, el grupo que lanzó los ataques del 7 de octubre, una manera de equilibrar las sanciones contra los colonos y ganar así el respaldo de Hungría, el país que había evitado la adopción de sanciones hace un mes, con República Checa también frenando el pacto. Josep Borrell, Alto Representante de la Unión para Política Exterior y de Seguridad, propuso las sanciones contra los colonos en diciembre.
Todavía quedan algunos detalles pendientes porque el acuerdo ha sido a nivel de grupos de trabajo, aunque el jefe de la diplomacia europea espera poder adoptarlas formalmente en breve. "Espero que continuemos hasta la total adopción pronto, pero ya tenemos un acuerdo político", ha señalado Borrell. Estas medidas incluyen congelar los activos de las personas sancionadas y una prohibición de ingreso en territorio de la Unión Europea.
Otro de los grandes asuntos sobre la mesa es la revisión del acuerdo de asociación entre la Unión Europea e Israel que solicitaron Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, y Leo Varadkar, primer ministro irlandés, dos de los países más cercanos a la causa palestina. La Comisión Europea todavía no ha realizado el análisis necesario para determinar si el Gobierno de Benjamin Netanyahu está cumpliendo con sus compromisos en materia de derechos humanos dentro de ese acuerdo, pero Borrell ha puesto el asunto sobre la mesa de los ministros, como le había solicitado hace un mes José Manuel Albares, ministro español de Asuntos Exteriores.
Las fuentes diplomáticas consultadas se muestran todavía muy divididas al respecto. Muy pocos creen que sea el momento de discutirlo, aunque una fuente diplomática francesa señala que es bueno tenerlo "sobre la mesa" como uno de los "instrumentos" con los que puede contar la Unión Europea para aumentar la presión sobre Israel. España, sin embargo, confía en que está logrando que la UE, en general, vaya acercándose hacia sus posiciones y busca seguir presionando. Borrell también ha seguido endureciendo su discurso, acusando a Tel Aviv de convertir la Franja de Gaza en un "cementerio".
Rusia y Ucrania
Además, los ministros de Asuntos Exteriores han discutido sobre las elecciones presidenciales en Rusia, un debate mezclado con el de la muerte del líder opositor Alexéi Navalni. Fuentes europeas confirmaron que los ministros discuten posibles sanciones contra personas que pudieran haber tenido responsabilidad en la muerte del disidente en una prisión siberiana pocas semanas antes de la votación.
Putin arrasa en unas elecciones sin rival y cimenta su poder absoluto en Rusia
L. Proto
Hay personas que piden ir más allá de aplicar sanciones. Rasa Juknevičienė, una eurodiputada lituana del Partido Popular Europeo, ha pedido que "además de las sanciones" los Veintisiete deberían "declarar oficialmente que no ha habido elecciones en Rusia y que Vladímir Putin no puede ser considerado el líder del país". "Putin no es presidente y la votación no fue una votación", ha criticado Juknevičienė. Preguntado por esta cuestión, Albares ha explicado que "a Putin le importa poco lo que pensemos la UE y países de la UE, todos tenemos relaciones con países que no tienen las garantías democráticas mínimas".
Además, los ministros de Asuntos Exteriores han aprobado la revisión del Fondo Europeo para la Paz (EPF, por sus siglas en inglés) con el que la Unión está financiando el envío de armamento a Ucrania. Los Veintisiete han aprobado una revisión de 5.000 millones de euros tras meses de discusiones por las reservas de Alemania respecto a cómo contabilizar su contribución al fondo y por la discusión sobre si financiar con ello la adquisición de armamento únicamente producido en Europa o también fuera de la UE.
]]>La primera de ellas es que Xi Jinping no concede entrevistas. Sin embargo, la mera hipótesis que sugiere la pregunta arroja varias claves interesantes y anima a reformular la pregunta del título que, en rigor, debiera ser más bien: ¿por qué Tucker Carlson fracasó en buena parte de cuanto pretendía al lograr convertirse en el primer comunicador occidental que ha entrevistado al mandatario ruso tras la decisión de invadir Ucrania? La respuesta explica, también, por qué nunca va a entrevistar al mandatario chino.
La mera conjetura de una entrevista a Xi Jinping nos obliga, en primer lugar, a indagar en los motivos por los que Putin acepta o rechaza una entrevista, especialmente sobre un tema delicado como un conflicto armado rechazado por la comunidad internacional, de difícil resolución y aún más turbio balance. Son muchas las razones por las que Putin ha concedido entrevistas a medios extranjeros, pero destacan consideraciones diplomáticas, objetivos estratégicos de comunicación y el perfil de la audiencia (o el electorado) de la plataforma en la que se divulga cada entrevista. En la que mantuvo con Carlson, la identidad del entrevistador (de cómo este y su audiencia sirven a los objetivos políticos o estratégicos del entrevistado), ha jugado un papel aún más determinante que las propias consideraciones diplomáticas y políticas que rodeaban la conversación.
Cualquier entrevista siempre tiene algo de ejercicio de careo y valentía; un internarse en tierra de nadie —el entrevistado a instancias del entrevistador, aunque a menudo también a la inversa—, en particular cuando este pertenece a un medio de comunicación extranjero, donde hay un riesgo alto de abordar temas delicados o enfrentar preguntas incómodas capaces de afectar la imagen pública del líder o las relaciones diplomáticas. En el caso de Carlson, junto a una indisimulada simpatía por el entrevistado, su ignorancia sobre la mayoría de cuestiones relativas al origen del conflicto en marcha anulaba la posibilidad de preguntas desafiantes.
Famoso por difundir bulos y teorías conspiranoicas (como, por ejemplo, que los chinos son inmunes al covid, que el FBI trama para acabar con la Navidad, que hay una maquinación para reemplazar al electorado de Estados Unidos por "votantes del tercer mundo más obedientes" o que Vladímir Putin está actuando de buena fe en el conflicto con Ucrania), sembrando sospechas sazonadas con oscuros augurios para el futuro próximo de un imperio estadounidense en declive, Carlson se presenta como el último estandarte de la verdad en un mundo en el que todos los demás medios de comunicación mienten.
Tucker justificaba su entrevista al ruso con el pretexto de que "la mayoría de los estadounidenses no tienen ni idea de por qué Putin invadió Ucrania o cuáles son sus objetivos ahora. Nunca han escuchado su voz". Sin embargo, en su entrevista llamó más la atención aquello de cuanto no se habló que aquello de cuanto Putin aleccionó, autocomplaciente, a Tucker.
Pese a la valentía que supone —en todo caso— ponerse delante de un miura como Putin (que ha encarcelado a numerosos periodistas), Tucker acabó concediendo a Vladímir una plataforma de dos horas para pontificar y socavar aún más el apoyo republicano a Ucrania, ofreciendo a los votantes de Trump una versión alternativa de la historia en la que Estados Unidos y la OTAN son los verdaderos agresores. Aunque no creo que en una entrevista —ni siquiera con personajes controvertidos— el periodista deba convertirse en centro de atención desafiando continuamente al entrevistado o reaccionando airadamente a cuanto este diga que le contraríe, Carlson no logró que la entrevista aportara, como le había prometido a su audiencia, ni un solo dato nuevo sobre por qué Putin invadió Ucrania. Al contrario, el entrevistador se convirtió en rehén de la interminable homilía de su entrevistado.
Putin sabía muy bien para qué y a quién le concedía la entrevista, así como en qué plataforma iba a emitirse esta: un canal de pago gestionado por el propio Tucker con una audiencia de ideología ultraderechista por la que ya han desfilado Viktor Orbán, Javier Milei, Marjorie Taylor Greene o el propio líder de Vox, Santiago Abascal. La visibilidad internacional de Tucker Carlson y su millonaria legión de seguidores, ha permitido al líder del Kremlin catapultarse al otro lado del Atlántico y proyectar su mensaje directamente a la audiencia occidental, especialmente al electorado de Trump, a quien el mandatario ruso vaticinó que "ganará las elecciones".
La plataforma de Carlson y sus declaraciones (a través de redes sociales) son accesibles fuera de EEUU y también encuentran eco entre los rusos, de manera que Putin se dirigía no solo al electorado de Trump, sino tangencialmente, también, a sus propios votantes. Por eso, la respuesta a la pregunta de por qué Xi Jinping no va a conceder una entrevista a Carlson se encuentra en el por qué él sí ha podido entrevistar a Putin: Trump y sus afines de la extrema derecha europea consideran que una Rusia blanca, cristiana y capitalista es parte de Occidente y ven, en una Rusia liderada por Putin, el mejor aliado potencial posible contra el "verdadero enemigo" a batir, que no es otro que China, a la que demonizan como una amenaza no blanca, asiática, atea y comunista a la "civilización occidental judeocristiana".
Carlson es un firme defensor de la campaña de contención contra China y, durante su etapa como presentador de Fox News, Carlson declaró: "Rusia no es el principal enemigo de Estados Unidos. Evidentemente, ninguna persona en su sano juicio piensa que lo sea. Nuestro principal enemigo, por supuesto, es China. Y Estados Unidos debería tener una relación con Rusia, alineado contra China". Y ahí es donde su entrevista con Putin descarriló pues, como dejó claro Putin, los republicanos no han logrado aislar a China de Rusia ni dividir a los BRICS. Putin tenía muy claros sus objetivos tácticos —sugerir los términos de un posible cese de hostilidades— al conceder una entrevista a Carlson y también los estratégicos. De ahí, su lúgubre advertencia a la audiencia occidental sobre un posible conflicto entre Occidente y China, subrayando que no considera productivo tratar de dividir a Rusia y utilizar su potencial combinado para la futura lucha con China.
Al admitir que Occidente teme más a una China fuerte que a una Rusia fuerte, refleja una evaluación realista de la dinámica del poder geopolítico actual. Así, Carlson y otros aliados de Donald Trump, han intentado durante años abrir una brecha entre Rusia y China, presionando a favor de una campaña belicista contra China. Aunque, personalmente, no comulgo con las tesis fatalistas que Carlson proclama para Occidente (y que rentabiliza en su propio beneficio, posicionándose como garante de una verdad que —dice— solo él está dispuesto a mostrar), sí que coincido con Carlson cuando asegura que la población china "entiende mejor todos estos cambios en el mundo" que los anglosajones, "inconscientes en su mayoría porque piensan que nada va a cambiar".
A diferencia de los medios occidentales, los chinos hacen gala de una política relativamente consistente de no intromisión en los asuntos internos de otros países. De este modo, los periodistas chinos raramente entrevistan a políticos de otros países y, a la inversa, los políticos chinos muy ocasionalmente conceden entrevistas a periodistas internacionales.
En concreto Xi Jinping, a diferencia de alguno de sus predecesores, es un líder que prioriza las interacciones con los medios controlados por el aparato de propaganda del Estado chino que gestiona y controla cuidadosamente todos los mensajes, presentando una imagen sólida, coherente y previsible, sin sobresaltos en el discurso ni cambios inesperados de guion (otra de las enseñas en el estilo comunicador de Tucker Carlson). En la conversación -prácticamente el monólogo- que mantuvo durante casi dos horas el presidente de la Federación Rusa con el polémico comunicador americano, queda patente lo alejada que está Rusia de China y lo alejada que está China de la imagen que de ella se tiene en EEUU, pero, sobre todo, lo alejada que está la figura de Putin de la de Xi Jinping. Así, puestos a imaginar entrevistas imposibles, imagino a Xi Jinping concediendo una al podcaster Lex Fridman. Aunque las preguntas —y las respuestas—, en ese hipotético toma y daca al mandatario chino, estarían perfectamente acotadas de antemano, esa charla yo no me la perdería.
***
Julio Ceballos es Consultor de negocio en China con dos décadas de experiencia en el país. También es autor de Observar el arroz crecer, cómo habitar en un mundo liderado por China (Ariel). Una recopilación de sus vivencias y aprendizajes en el gigante asiático.
]]>El presidente apenas realizó campaña electoral alguna, saltándose debates y mítines, pero siempre se mantuvo omnipresente en un ecosistema mediático dominado completamente por su Gobierno. Inmediatamente después de que se anunciara la previsión de resultados, el Kremlin no tardó en enmarcar la mayor victoria electoral de Putin como un espejo del abrumador respaldo público a su invasión de Ucrania a través de canales como Rossiya-24, que destacaron el "colosal apoyo al jefe de Estado en funciones" en un contexto marcado por "sanciones y presiones sin precedentes".
El propio Putin, en un discurso y rueda de prensa posterior para celebrar su victoria, prometió "llevar a cabo las tareas en el contexto de la operación militar especial", el eufemismo con el que se refiere a la guerra en Ucrania. Los resultados, afirmó, han ayudado a “consolidar la sociedad” en torno a su liderazgo, el mismo mensaje que llevaba horas siendo transmitido por la televisión estatal. Cuando fue cuestionado sobre si creía que era posible un conflicto a gran escala entre Rusia y la OTAN, el presidente respondió: "Creo que todo es posible en el mundo hoy en día".
Putin, en el poder desde el año 2000, no contaba ni con un atisbo de oposición real. Su opositor más célebre, Alexéi Navalni, murió el pasado mes de febrero en la cárcel del Ártico en unas circunstancias todavía no esclarecidas por el Kremlin. Boris Nadezhdin, un candidato conocido por su postura contra la guerra de Ucrania, obtuvo las 100.000 firmas necesarias para presentarse, pero fue descalificado de la carrera electoral por unas presuntas “irregularidades” denunciadas por la comisión electoral rusa. Yekaterina Duntsova, expresentadora de televisión, fue también descalificada a finales del año pasado.
El eterno retorno de Vladímir Putin (y del imperialismo ruso)
Argemino Barro
Los comicios también fueron celebrados sin la supervisión de un organismo independiente. El grupo Golos, conocido por sus seguimientos electorales, fue designado un "agente extranjero" por el Gobierno y tiene prohibido evaluar las elecciones. Muchos gobiernos internacionales, así como activistas por los derechos humanos, han denunciado las irregularidades y la falta de transparencia en el proceso electoral, pero Putin nunca se ha mostrado preocupado por estas nimiedades.
Una de las estrategias de Vladímir Putin para perpetuarse en el poder ha sido convencer a los ciudadanos de que un futuro sin él sería devastador para Rusia. Con un discurso constante sobre los intentos de Occidente por desestabilizar el país y la amenaza existencial que esto supone, el presidente ha conseguido proporcionar a muchos rusos una sensación de estabilidad que solamente puede mantenerse con su continuidad política.
Desde semanas antes de los comicios, se esperaba una gran participación. Finalmente, fue del 73% del electorado, unas de las más altas de la historia. Votar no es obligatorio en Rusia, pero el Kremlin tiene varias herramientas para asegurar que una gran parte de los 143 millones de habitantes acuda a las urnas. Además de las tres jornadas de votación y la implementación del voto electrónico en 29 regiones, el Kremlin cuenta con el apoyo de los jefes de empresas, que obligan a los trabajadores a votar. Por otro lado, se han utilizado métodos como regalar iPhones y electrodomésticos Dyson a aquellas personas que enviaran selfis en los colegios electorales, informó The Guardian.
Algunas imágenes curiosas de las jornadas electorales —que comenzaron el pasado 15 de marzo— quedarán para la posteridad. Además de los matrimonios recién casados yendo a votar, se han divulgado fotografías en redes sociales de votantes posando al lado de un recorte de cartón de Tucker Carlson. En una ciudad de Siberia, una persona ha emitido su voto disfrazada de Stalin. Al mismo centro de votación ha llegado otra persona disfrazada, en este caso del zar Alejandro II de Rusia.
Las elecciones tampoco han estado exentas de intentos de socavar la votación. El viernes, el primer día de los comicios, varios rusos vertieron líquidos como tinta en las urnas que contenían papeletas. En Kogalym, Siberia occidental, una mujer provocó un pequeño incendio dentro de un colegio electoral. Todos fueron detenidos por la policía.
Ese mismo día, Vladímir Putin acusó a Ucrania de boicotear el proceso electoral en Rusia con el despliegue de 2.500 soldados en la región fronteriza de Belgorod. Ha sido una de las últimas declaraciones del presidente relacionadas con la invasión a gran escala, después de una campaña marcada por los discursos sobre la superioridad bélica del país. Después de más de dos años de guerra en Ucrania, las tropas de Moscú han conseguido avances en frentes como el de Avdíivka, la primera ciudad que han conquistado desde la toma de Bajmut el año pasado.
Sin embargo, Greg Yudin, sociólogo ruso e investigador de la Universidad de Princeton, afirmó que los rusos están preocupados por la guerra y que esa incertidumbre provoca, a pesar de todo, que los votantes apoyen a Putin. "Hay temores sobre lo que sucederá si no ganamos: si seremos humillados, si todos serán procesados, si tendremos que pagar enormes reparaciones y, básicamente, ponernos bajo control extranjero", dijo a The New York Times. “Pero estos temores están alimentados por Putin, quien también se ha posicionado como el único que puede poner fin a la guerra”.
*Si no ves correctamente este formulario, haz clic aquí
El triunfo de Putin le garantiza seis años más al frente de Rusia, pero, si la salud se lo permite, no serán los últimos. Según las reformas constitucionales que llevó a cabo en 2020, el presidente puede ser reelegido para dos mandatos más, lo que permitiría permanecer en el poder hasta 2036. Si eso sucede, sería el jefe de Estado que más tiempo ha estado en el poder, por encima de Joseph Stalin.
]]>La medida está prevista que se empiece a aplicar en el año 2026 con el objetivo de aportar más igualdad entre hombres y mujeres en las filas del Ejército danés, y de conseguir que cada año 5.000 jóvenes hagan el servicio militar (en un país con 5,8 millones de personas). El plan anunciado para reformar las fuerzas armadas danesas también incluye un aumento sustancial del presupuesto en defensa de 40.500 millones de coronas (5.530 millones de euros) que se destinarán entre este año y el 2028. La medida aún tiene que redactarse en forma de ley y ser aprobada por el parlamento, pero el gobierno confía en que podrá tirar adelante con la reforma, ya que el folketing (Parlamento danés) votó en junio a favor de incluir más igualdad en el Ejército.
El gobierno danés ha presentado el plan como un fortalecimiento histórico y necesario de las fuerzas armadas debido al incremento de las tensiones con Rusia y a la guerra en Ucrania. La primera ministra del país, Mette Frederiksen, declaró que "no nos estamos rearmando en Dinamarca porque queremos guerra, destrucción o sufrimiento. Nos estamos rearmando ahora mismo para evitar la guerra, en un mundo donde el orden internacional está siendo desafiado". Sobre el reclutamiento femenino, el ministro de defensa, Troels Lund Poulsen, aseguró que "con un reclutamiento más sólido, incluido la plena igualdad de género, se contribuirá a resolver los desafíos de defensa, movilización nacional y dotación de nuestras fuerzas armadas".
De esta forma, Dinamarca pasará pronto a ser el tercer país europeo con reclutamiento femenino obligatorio. Los otros dos países que también incluyen a las mujeres en el servicio militar son sus vecinos nórdicos. En el año 2017, Suecia ya reinstauró el servicio militar obligatorio para hombres y mujeres después de haberlo abolido en el año 2010, cuando solo era para hombres, y Noruega lo introdujo en el año 2013 también para ambos sexos.
Suecia completa con su ingreso a la OTAN una región nórdica bajo el control de la Alianza
Ó. H.
Dinamarca cuenta actualmente con un Ejército profesional de 9.000 soldados, además de 4.700 reclutas voluntarios que espera ampliar en los próximos dos años. Sin embargo, no todos los mayores de 18 años son llamados a realizar el servicio militar, ya que cada año se cubren las plazas con personas que se alistan de forma voluntaria. En caso de que en un año no haya suficientes reclutas, se hace un sorteo que determina quién irá a filas, aunque los escogidos en el sorteo siempre pueden alegar objeción de conciencia y prestar otro servicio civil.
Actualmente, las mujeres en edad de reclutamiento que lo desean ya pueden realizar el servicio militar en el país escandinavo, y según cifras oficiales, estas representan el 25 por ciento de los soldados voluntarios. Según el nuevo modelo de servicio militar, los reclutas recibirán cinco meses de entrenamiento básico antes de pasar seis meses de servicio operativo en el Ejército de Tierra, la fuerza aérea o la marina, donde continuarán con el entrenamiento.
Un rearme disuasorio
El plan para el rearme danés también irá acompañado de más millones en el presupuesto en defensa. Así, el país nórdico destinará este año y el siguiente el 2,4% de su PIB en defensa, contando con la ayuda militar que actualmente envía a Ucrania. El gobierno aclaró que a partir del año 2026 se destinará el 2 por ciento del PIB ya sin contar las donaciones a Kiev. De hecho, Copenhague es uno de los gobiernos europeos que más se ha involucrado en la ayuda militar a Ucrania, y este verano esté previsto que suministrará aviones de combate F-16 para combatir a la aviación rusa.
El gobierno destinará el resto del incremento del presupuesto a reconstruir su defensa aérea terrestre de corto y largo alcance, constituir una brigada de 6.000 soldados, equipar a las fragatas danesas con sistemas antisubmarinos, y a proporcionar vehículos blindados nuevos a los batallones de infantería. En paralelo a estas medidas, el gobierno anunció en el pasado otoño que retomaría la producción de munición para su arsenal doméstico después de 55 años. Para hacerlo posible, desde el Ministerio de Defensa se anunció la compra de una fábrica de armas en el noroeste del país por un precio de 19.6 millones de coronas (2.8 millones de euros).
Todas estas mejoras son requisitos que se han hecho desde la OTAN al país nórdico para mejorar la defensa en la región del mar Báltico después de que Suecia y Finlandia pasaran a formar parte de la alianza. Según explicó el ministro de asuntos exteriores danés, Lars Løkke Rasmussen, la restructuración de las fuerzas armadas danesas se ha vuelto un imperativo para que el país pueda afrontar los nuevos desafíos geopolíticos y actualizarse a nivel de la tecnología militar. En este sentido, el ministro de exteriores señaló que las medidas anunciadas se toman como una forma de disuasión: "Rusia no representa una amenaza para Dinamarca, pero no vamos a colocarnos en una posición en la que ellos puedan llegar a hacerlo", dijo.
Compensar un déficit histórico
El anuncio del plan de reforma de las fuerzas armadas era muy esperado entre los expertos en defensa y en las filas del Ejército. En un contexto de décadas de recortes y ajustes presupuestarios en defensa, el deterioro de la defensa danesa ha sido un tema que se ha discutido ampliamente en el país nórdico desde que se inició la guerra en Ucrania. Los expertos señalan que las Fuerzas Armadas danesas arrastra varios problemas, pero el más relevante de ellos es la falta de soldados entre sus filas. El Ministerio de Defensa calcula que faltan unos 1.000 reclutas, o lo que es lo mismo, uno de cada cinco puestos de trabajo en el ejército queda vacío por la falta de soldados.
La falta de personal militar también es palpable entre los rangos oficiales más bajos, como los sargentos, y entre los comandantes, precisamente los puestos que se encargan del entrenamiento y la formación de los nuevos reclutas. Además de esto, la falta de munición, principalmente de artillería, ha llevado al ejército danés a una situación crítica que no solamente preocupa en el Ministerio de Defensa, sino también entre los países del entorno y los aliados a la OTAN.
Otro de los déficits históricos que se tienen que compensar es la armada del país, encargada de patrullar el mar Báltico y partes del mar del Norte para proteger infraestructuras tan críticas como gaseoductos, instalaciones extractivas, y parques eólicos marinos. En los últimos meses, la prensa danesa también ha publicado informaciones acerca del mal estado, las humedades y la insalubridad de los barracones que el ejército tiene situados en Copenhague, donde se aloja la Guardia Real del país.
]]>Vladímir Putin lleva 24 años en el poder, pues fue nombrado presidente de la Federación de Rusia en las elecciones de marzo del año 2000. Desde entonces, ha sido renombrado electoralmente como presidente hasta en cuatro ocasiones.
Es licenciado en Derecho por la Universidad de San Petersburgo, donde tuvo como profesor al que fuera alcalde de dicha ciudad, Anatoli Sobchak. En 1975 ingresó en la Dirección de la inteligencia exterior del Comité de Seguridad del Estado en la URSS, la KGB, donde trabajó durante dieciséis años como espía de la organización.
También formó parte del Instituto de Inteligencia Red Banner, lo que le sirvió para aprender inglés y alemán, ya que vivió en Dresde, Alemania, durante cinco años. En mayo de 1990 fue nombrado asesor en asuntos internacionales del entonces alcalde de San Petersburgo, Anatoli Sobchak.
Antes de renunciar a la KGB en 1991, para comenzar su carrera política en San Petersburgo, fue director brevemente del Servicio Federal de Seguridad (SFS) y secretario del Consejo de Seguridad. En una entrevista en 2017 con Oliver Stone, Putin aseguró que renunció a ser parte de la inteligencia rusa tras el golpe contra Mijaíl Gorbachov. Según sus declaraciones, pudo trabajar como taxista privado para ganar un dinero extra.
El primer cargo político que ocupó fue el de la presidencia del Comité para Relaciones Internacionales del Ayuntamiento de San Petersburgo, que ostentó hasta 1996. Ese año se mudó a Moscú para unirse a la administración del entonces presidente Borís Yeltsin, después de cuya renuncia, Putin fue nombrado presidente interino. Menos de cuatro meses después fue elegido de forma absoluta. Antes ocupó diversos cargos, entre ellos, el de vicedirector del Servicio Administrativo y Técnico del presidente de la Federación Rusa y jefe de la Dirección General de Inspecciones del presidente. Su buena relación con Yeltsin le hizo ascender hasta primer vicepresidente del Ejecutivo.
Fue en 1999 cuando Borís Yeltsin sustituye a Serguéi Stepashin por Vladímir Putin en el cargo de primer ministro de Rusia. Posteriormente, presentó su dimisión como presidente de Rusia, el día de Nochevieja, y Putin es nombrado como su sucesor como jefe de Estado, hasta las elecciones de marzo de 2000, cuando salió victorioso. Ha sido reelegido en 2004, en 2012, 2018 y 2021 (de 2008 a 2012 fue primer ministro con Dmitri Medvédev como presidente). Ha promulgado enmiendas constitucionales para poder ser reelegido hasta en dos ocasiones más, por lo que su presidencia podría extenderse hasta 2036.
]]>La erupción, que se ha podido ver desde la capital, Reikiavik, por el momento no presenta ningún peligro para las personas y los científicos se encuentran en la labor de intentar obtener una imagen de la situación desde un helicóptero.
Los expertos han contado alrededor de 80 terremotos antes de la erupción real y la longitud de la fisura rota es de unos 3,5 kilómetros. Los equipos de rescate se han quejado de los turistas que habían viajado a la región para ver el volcán en erupción.
Grindavík se encuentra en la península de Reykjanes, a unos 55 kilómetros al suroeste de Reikiavik. Desde mediados de diciembre se han producido cuatro erupciones volcánicas en la península, una de ellas en enero, que afectó a tres casas en las estribaciones septentrionales de la comunidad de 4.000 personas. El futuro de la comunidad es incierto, pero por el momento el Gobierno ha presentado un proyecto de ley que permitiría a los residentes vender sus casas a una empresa estatal.
]]>Le dimos por muerto y ha resucitado: el secreto del incombustible Trump
Argemino Barro. Nueva York
"Durante mi campaña dejé claro que había profundas diferencias entre nosotros en una serie de ámbitos, y no solo en el ejercicio de mis deberes constitucionales el 6 de enero" de 2021, dijo Pence en referencia al ataque al Capitolio, día en que él se negó a seguir las indicaciones de Trump para rechazar los resultados del Colegio Electoral que daban la victoria a Biden.El que fuera su vicepresidente apuntó que, "de buena fe", no puede darle su apoyo.
Otra precandidata republicana, la exembajadora de EE.UU. ante la ONU Nikki Haley, tampoco le dio su apoyo cuando se retiró de la liza a principios de mes, tras su derrota en el supermartes, y aseguró que Trump tendría que ganarse a quienes votaron por ella.Trump sí tiene en cambio el respaldo general del Partido Republicano y de sus líderes en el Congreso. El último en concedérselo fue el pasado 6 de marzo el líder de la minoría conservadora en el Senado, Mitch McConnell.Para el legislador, las primarias del 5 de marzo, día conocido como supermartes porque los republicanos celebraron comicios en una quincena de estados, demostraron que Trump se había ganado el apoyo requerido de los votantes republicanos para ser el candidato.
]]>Cuando se van a cumplir dos años del inicio de la invasión rusa a gran escala de Ucrania, la cuestión de los prisioneros de guerra y sus familias sigue siendo extremadamente delicada para Kiev. El Gobierno ha defendido que traerá de vuelta a todos sus héroes de Ucrania capturados en la defensa del país, entre el temor generalizado a las represalias rusas. Sin embargo, en el último año Rusia ha bloqueado durante casi seis meses todo intercambio, ante la angustia de las familias. Y cuando se volvieron a renovar, en diciembre pasado, forzó la catástrofe del derribo de un avión en el que, presuntamente y siempre según Moscú, iba una tanta de prisioneros ucranianos para intercambiar.
En su ataque total a las defensas ucranianas, Moscú lleva meses tensando una nueva cuerda, esperando que en algún momento se rompa y se vuelva contra Kiev: la de las familias de los prisioneros de guerra.
“Retrasando los intercambios, los rusos están tratando de destruir la confianza entre el Gobierno y las familias de los prisioneros de guerra ucranianos”, sostiene Petro Yatsenko, portavoz del Centro de Coordinación para el Procesamiento de los Prisioneros de Guerra en Ucrania.
Retrasar los intercambios, publicar en redes vídeos de prisioneros ucranianos torturados en campos rusos, las simples imágenes de soldados famélicos intercambiados por hombres bien alimentados… La lista de herramientas rusas para torturar psicológicamente no solo a las familias de los soldados ucranianos, sino también al alma del país, empieza con algo tan sencillo como una llamada. O más bien, la inexistencia de esa llamada que confirma (o no) si un soldado desaparecido está muerto o detenido. “Si no hay cuerpo, no hay hechos”, explica un trabajador del centro, que trata diariamente a familias de prisioneros de guerra ucranianos.
La incertidumbre es total, y eso tortura a las familias, que mientras tanto ven cómo Ucrania —muy consciente también de la necesidad de mantener el apoyo internacional— cumple las normas básicas de tratamiento de los prisioneros de guerra según la Convención de Ginebra.
¿Qué está pasando con los prisioneros de guerra en Ucrania?: "Quieren provocarnos"
Olha Kosova. Kiev
En la sede del Centro de Procesamiento en Kiev, la presión emocional y psicológica que sufren las familias de los prisioneros ucranianos es patente. Hoy, 19 personas —hijas, esposas, madres, padres, hermanos— se reúnen en una suerte de chequeo de la información que Ucrania ha podido reunir sobre sus familiares capturados, así como lamentar en grupo su situación o ayudarse incluso con el papeleo. Muchos no están aquí por primera vez.
“¿Por qué los rusos pueden llamar a sus familias una vez cada dos semanas y a nosotros no nos dejan? ¡Queremos poder hacerlo!”, se lamenta una de las madres. Pocos minutos después, la reunión tiene que suspenderse: ha sonado la alarma antiaérea.
“Estamos viendo muchos prisioneros ucranianos a los que se les impide comunicarse con sus familias: cartas, mensajes… Algunos llevan más de un año capturados y todavía no han contactado con su familia”, dice Danielle Bell, directora de la Misión de la ONU Derechos Humanos en Ucrania. “Esa falta total de información hace que las familias estén fuera de sí”, añade, en entrevista con El Confidencial.
Este diario ha visitado uno de los centros de detención de prisioneros de guerra rusos en Ucrania. Allí, en un oscuro corredor, un grupo de al menos doce soldados capturados esperan en fila india su turno para usar el teléfono. Un prisionero de guerra ruso, ya entrado en años, está justo llamando a su casa. Al otro lado de la línea se oye la voz de una mujer, preguntándole cómo está. “Todo bien”, responde el soldado. “¿Qué dices, cómo que todo bien? ¡Estás detenido en Ucrania!”. “Todo bien”, insiste el ruso, con voz calmada, mientras un guarda ucraniano se sienta a su lado y escucha la conversación.
"¿Por qué somos tan tolerantes con los rusos? Si no acatan la Convención de Ginebra, ¡nosotros tampoco!"
El equipo telefónico que conecta esta prisión en el oeste de Ucrania con las familias a lo largo y ancho de Rusia ha sido facilitado por el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR). Según detalla Yatsenko, se les permite llamar a sus familias no solo cuando llegan, para avisarles de que están vivos y son prisioneros de guerra, sino también cinco minutos cada dos o tres semanas desde entonces. Ucrania también informaría a las autoridades rusas prácticamente del 100% de los soldados capturados, gracias entre otros al acceso que se le permite a organizaciones internacionales como la propia Cruz Roja. Moscú da la callada por respuesta, se quejan desde Kiev.
El silencio y la incertidumbre que lo acompaña es un arma, pero incluso cuando hay comunicación, es manipulada.
Olena*, una profesora de música de Vinnytsia (centro del país), habla de su hijo. Con solo 23 años, fue capturado durante el verano de 2022. Poco después, recibió unos mensajes vía la aplicación Viber. “Pero podía ver que no era él quien me estaba escribiendo, era otra persona. Podría reconocer por sus frases y palabras, por el uso de las comas”, cuenta Olena, apretando los puños, mientras intenta recomponerse. “Así que le pregunté: ¿cómo se llama tu profesor de informática? ¿Cómo se llama tu gato?”.
Entonces los rusos empezaron a mandarle vídeos en los que pudo ver a su hijo con la cara amoratada por los golpes. “También me mandaron mensajes con su voz, con él hablándome y diciéndome ‘mamá, estoy en el trabajo. Todo está bien”. Después, no volvió a saber nada de él. “Y entonces recibí una notificación [del Ejército de Ucrania] de que estaba desaparecido [en combate]. Sin más información; no podía creérmelo”.
La primera vez que lo vio con vida fue el 19 de enero de 2023, cuando apareció en un vídeo de propaganda rusa en un canal de Telegram.
Unos meses después, un soldado ucraniano liberado, recluido en la misma celda que su hijo, le dijo que sigue allí y vivo. Olena muestra una carta que escribió al Papa pidiendo ayuda. Su tío vive en España desde hace 25 años, y la apoya económica y emocionalmente desde Málaga.
"Es muy difícil hablar con las familias, porque están muy frustradas. Por supuesto, saben que las condiciones de detención en Rusia son mucho peores y que a los rusos no les importa el derecho internacional humanitario", explica Yatsenko. En la misma línea habla Bell, la directora de la misión de la ONU. "Hemos observado pautas de tortura y horribles condiciones de detención. El 91% de los prisioneros de guerra ucranianos dan testimonios creíbles y fiables de tortura".
El relato de Bell, fundamentado en entrevistas con centenares de soldados ucranianos intercambiados de vuelta al país, habla de lo que llaman "palizas de bienvenida", con descargas eléctricas, apaleamientos brutales, amenazas de ataques con perros, palizas con porras, martillos, descargas eléctricas y cuchilladas. Bell también señala violencia sexual, "incluidas violaciones, desnudez forzada, cacheos y desnudamientos injustificados, incluso en presencia de personal penitenciario del sexo opuesto, y prácticas humillantes y degradantes como obligar a hombres, a grupos de prisioneros de guerra, a arrastrarse desnudos y con las piernas abiertas". "No cabe la menor duda de que se trata de una práctica habitual y generalizada por parte de las autoridades de la Federación Rusa contra los prisioneros de guerra ucranianos", concluye.
El Confidencial ha hablado con un soldado ucraniano que pasó cuatro meses en cautiverio ruso. "Durante esos meses nos pegaron dos veces al día, por la mañana y por la noche, durante unos 30 minutos cada vez". Describe el uso de diversas herramientas, como martillos de goma, que eran de las más inofensivas. No quiere entrar en más detalles sobre otros métodos. Otro soldado, con un caso similar, relata cómo recuerda el momento en el que finalmente fue intercambiado por prisioneros de guerra rusos. "Cuando veíamos a los rusos en la línea de intercambio, podíamos notar lo bien alimentados y sanos que parecían, en comparación con nosotros. Por supuesto, es difícil de vivir algo así. Pero entendemos que ésta es la principal diferencia entre ellos y nosotros".
En Kiev, donde las familias se desahogan esperando noticias de sus hijos, hermanos o esposos, la rabia va bullendo. "¿Por qué somos tan tolerantes con los prisioneros de guerra rusos?", pregunta una mujer, visiblemente enfadada. "Si ellos no acatan la Convención de Ginebra, ¡nosotros tampoco deberíamos!". Un funcionario ucraniano intenta calmar la situación. "Respetamos el derecho humanitario. Por favor, créanme, si cambiáramos eso, solo empeoraríamos las cosas".
En este escenario se produce una situación casi paradójica. Mientras que las organizaciones internacionales en Rusia tienen las manos atadas, y en la gran mayoría de los casos ni siquiera están informadas sobre el paradero de los prisioneros de guerra ucranianos, en Ucrania se centran en mejorar las condiciones de los prisioneros de guerra rusos.
"No tenemos forma de obligar a los Estados a hacer nada, esa es la realidad", admitía Achille Després, portavoz del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), en una entrevista con la emisora de radio ucraniana Hromadske.
Una prisión 'amable' con los rusos
En una de las paredes del principal centro de detención de prisioneros de guerra rusos en Ucrania hay placas azules recién impresas, con fragmentos de párrafos de la Convención de Ginebra sobre el trato que se debe dar a los prisioneros de guerra. El idioma: ruso.
"Antes solo estaban en ucraniano", explica Yatsenko. "Pero el CICR nos pidió que tradujéramos estas importantes normas para que los prisioneros pudieran entenderlas perfectamente".
Detrás del muro con las placas está la enfermería, recientemente renovada. Aquí, soldados detenidos con diversas heridas de batalla descansan en catres. En la sala contigua, un grupo de prisioneros de guerra ve la televisión en una gran pantalla. También se pueden ver tableros de ajedrez. En el mismo pasillo hay nuevas salas de tratamiento, incluida una luminosa sala blanca con un sillón e instrumental de dentista.
La renovación fue financiada en gran parte por el CICR, que visita con frecuencia los campos para hablar con los prisioneros rusos, señalar los problemas de las cárceles y sugerir mejoras. "Cuando los rusos empezaron a bombardear nuestra infraestructura eléctrica, el CICR compró un generador muy grande para el campo, con el objetivo de ayudar a los prisioneros a sobrevivir al invierno, incluso en el caso de que una bomba rusa destruyera la central eléctrica", explica Yatsenko.
La paradoja de prisioneros con calefacción mientras civiles ucranianos aprietan los dientes por el frío que deja la destrucción de los drones rusos no sienta bien a parte de la sociedad ucraniana, admite el funcionario. "Pero queremos demostrar que, como país europeo, tratamos a los prisioneros de guerra de acuerdo con la Convención de Ginebra. Y si tratáramos a los rusos como los rusos tratan a nuestro pueblo, seríamos como ellos". El CICR ha admitido en varias ocasiones que no tiene el mismo nivel de acceso ni las mismas facilidades para proteger a los prisioneros de guerra ucranianos al otro lado de la línea del frente.
No parece haber represalias a los comentarios a periodistas en el centro de detención de Ucrania. Un prisionero de guerra ruso afirma a El Confidencial que se alistó a la guerra para "castigar" a los ucranianos. Otro, que se presentó voluntario buscando adrenalina, lamenta amargamente que la protagonista de la guerra fuera la artillería, ya que esperaba más "combates directos uno vs. uno". Otro, soldado profesional, se mantiene en la narrativa de Moscú, negándose a hablar de "guerra" y hablando en su lugar de la "operación militar especial". Un último prisionero afirma haber sido engañado por las autoridades de reclutamiento y que, si tuviera que elegir de nuevo entre la trinchera y la cárcel en Rusia, hubiera elegido la cárcel.
Todos esperan el intercambio; algunos volverán después al frente, a petición propia, otros no. Es probable que muchos de ellos estén ya de vuelta a Rusia.
Antes del intercambio, todos los prisioneros de guerra rusos reciben una tarjeta de visita de los ucranianos. Contiene un número de teléfono al que pueden llamar o escribir si, cuando estén de vuelta al frente, quieren rendirse.
Si tienen suerte, encontrarán el camino de vuelta a un centro de detención, tras los muros de chapa nueva en los que están escritos los Convenios de Ginebra. Mientras tanto, la mayoría de los padres, parejas, hijos y amigos de los prisioneros de guerra ucranianos siguen sumidos en la más absoluta incertidumbre, y vulnerables a la manipulación psicológica de Rusia.
Y no tienen más remedio que seguir esperando... y esperando.
* Este artículo se ha financiado parcialmente con una beca periodística del fondo europeo IJ4EU
El político argentino nunca hubiera llegado hasta aquí si no fuera un personaje televisivo de éxito, un tertuliano incendiario y un polemista catódico. Por eso, choca que sus momentos más bajos en la campaña electoral hayan sido dos patinazos en la tele.
Primero, una entrevista en la que pasó de la carcajada a la lágrima sin motivo aparente, desplegó un festival de caras raras y pareció superado emocionalmente por los asuntos más nimios.
El segundo evento televisivo negro —el cara a cara contra Sergio Massa— fue el de la parálisis política. El candidato peronista (y ministro de Economía en funciones) aplicó a Milei un tercer grado, como si fuera el presidente en lugar de un candidato, y sin encontrar gran resistencia. Un Milei desarmado y escaso de recursos. Tertuliano de oro frito en el peor momento.
Javier Milei ha colapsado en directo esta noche en la televisión argentina.Se había hablado mucho de la endeble salud mental del candidato, pero no se había visto nada tan exagerado como hoy, problemas para gesticular, oía "voces". Ha sido tremendo👇Hilo👇 pic.twitter.com/nXA3BBrsg5
— JuanFran Albert (@JFranAlbert) October 27, 2023
En la primera escena, un Milei histriónico y con vaivenes psicológicos; en la segunda, más petrificado que De Gea en el Mundial 2018.
Hay momentos que pueden definir una elección, y este puede ser uno de ellos. En un debate presidencial lo que no puede hacer un candidato es quedarse sin que decir. Esto ocurrió hoy entre Milei y Massa. El próximo domingo las elecciones. pic.twitter.com/4N1TSjDLtj
— Félix de Bedout (@fdbedout) November 13, 2023
Consciente de que no le fue bien, pero poco amigo de asumir errores, Milei achacó sus flojas dos performances catódicas a aviesas maniobras de sus rivales; según él, infiltrados en plató murmuraban y tosían cada vez que intervenía para desestabilizar sus argumentaciones. Sus excusas activaron una nueva ronda de memes sobre las voces que Milei escucharía en su cabeza. Llovía sobre mojado. La biografía no autorizada de Milei, El loco, desveló que el candidato habla con sus perros clonados sobre lo divino y lo humano y que tiene arrebatos místicos. Por otro lado, no era la primera vez que a Milei se le iba la pinza en un plató (con más motivo ahora que está sometido a la mayor presión y exposición pública de su vida).
Dicho lo cual: aunque analizar a Milei desde sus disfuncionalidades psicológicas es goloso, y hay agua de sobra en la piscina para hacerlo, quizá sean más síntomas que causas de su desconcertante rendimiento en campaña. Lo que verdaderamente habría desajustado a Milei no serían las aspas de helicóptero que (dicen) retumban en su cabeza, sino su pacto forzado con la casta.
"Javier Milei es un loco, pero es nuestro loco": lo que le espera a Argentina
Carlos Prieto
"La inestabilidad de Milei en la entrevista en A24 no es nueva: simplemente está exacerbada, en un momento en que muchísimos ojos se posan sobre él. Y tiene sentido. El libertario no solo sufrió el golpe de la elección en la que no ganó, sino que se le sumó el hecho de tener que negociar mano a mano con Macri. Esto es una novedad en la vida de Milei: él hasta ahora no hacía política, se manejaba a sus anchas en un partido ultraverticalista y caótico y rechazaba inmiscuirse a fondo en temas como el armado de listas o las alianzas. La política nunca le interesó, por eso ahora está entrando en un terreno nuevo y resbaladizo", según la revista Noticias.
La implosión televisiva Milei vendría, por tanto, de su dificultad para cabalgar sus nuevas contradicciones (el antisistema que quiere dirigir el sistema con ayuda de la derecha sistémica). Todo lo demás —sus desconcertantes comportamientos en plató los últimos días— mostrarían, sobre todo, su incomodidad con su nuevo rol de favorito de cierta casta a la que tanto despreció.
El cara a cara con Massa fue un continuo cavar y cavar en sus incoherencias, con un Milei incapaz de asumir su programa de máximos, que tantas veces bramó antes en los magazines televisivos. El Milei tertuliano amenazó una y mil veces con destruir todas las paguitas argentinas, motosierra en ristre, pero fue preguntarle Massa sobre qué subsidios quitaría si llegaba a presidente, y echar balones fuera, como si Locomía negara haber agitado alguna vez abanicos gigantes en Ibiza. ¿Recortes? ¿Qué recortes? Milei contra Milei.
A Milei se le complicó la vida al no ganar la primera vuelta con contundencia. A juzgar por mamporros metidos a la derecha tradicional durante esa campaña —a la candidata Patricia Bullrich le llamó "terrorista" por su pasado montonero— quizá Milei fantaseaba con llegar a la cima por la única vía de la voladura de puentes. Pero cuando se vio en la necesidad de acumular fuerzas para la segunda vuelta, se echó en brazos del expresidente Mauricio Macri, gran mandarín de la derecha de toda la vida. ¿El resultado interno del pacto de conveniencia? La derecha unificada se partió: los radicales —del expresidente Alfonsín— se negaron a apoyar a Milei, pero los hombres de Macri sí estarían en un futuro gobierno del libertario. El entramado de Milei, por su parte, tuvo también pequeñas fugas por pactar con la casta, pero sobre todo se le quebró el discurso político y el personaje. Milei dejó de ser Milei a cambio de estructura mainstream para asaltar los cielos.
El solapamiento ha llegado al punto de que la campaña de Milei ha calcado el spot electoral que le funcionó a Macri en su campaña presidencial en 2015. ¿La idea de fondo del anuncio de Milei? No tengan miedo que no voy a recortar lo que dicen que vamos a recortar.
El spot que acaba de sacar Milei es igual al de Macri en 2015. La comparación: pic.twitter.com/oNeVLuJ6pi
— Gino (@GinoViglianco) November 16, 2023
Vi-vi- viva la casta
Habla el sociólogo Iago Moreno, que ha seguido la campaña en Buenos Aires:
"Hasta la primera vuelta, el discurso de Milei se parecía más al del Movimiento Cinco Estrellas italiano que a Vox, un relato en la vertical pueblo contra casta, que incidía muy poco en la guerra cultural, poco antifeminismo o clasismo contra los villeros, era sobre todo un discurso de impugnación pueblo/casta destinado a capitalizar un descontento que lo cierto es que es mayoritario".
"Tras pactar con Macri, Milei pasó del discurso impugnador del pueblo contra la casta al del antikirchnerismo"
Pero, ¡ay!, cuando Milei y Macri se dieron el sí quiero, hubo que hacer algunos ajustes al discurso. "Desde el primer momento, entendieron que la arquitectura moral, política y social que permitía soldar ambos entramados en un bloque conjunto era volver al discurso antikirchnerista. El relato contra la casta se adelgazó para que entrara en ese molde, que dejaba muchas cosas fuera, pero aseguraba sumar al carro todo el armado político de Macri, fundamental no tanto por su extensión territorial como por su red de influencias”.
En el debate quedó claro que Milei no es un candidato competente. Bien no tiene ideas sobre cómo funciona la política exterior o el comercio de un Estado, bien se hace el loco a niveles esperpénticos. La única (y remota) posibilidad que tenía Massa de ganar era ir hacia un escenario así. Hace unos meses, sus opciones parecían inverosímiles, el descontento era muy generalizado, los índices de aprobación del presidente Alberto Fernández eran más bajos que los de Fernando de la Rúa cuando huyó en helicóptero de la Casa Rosada [el corralito en 2001]. Pero con Milei haciendo una campaña bastante lastimosa, el descuadre de Macri y un Massa reforzado —con el Gobierno de perfil para no desgastar su candidatura y el apoyo tácito y efectivo de un montón de perfiles que no están dispuestos a pasar por Milei— hay partido. ¿Quién va a ganar? Las encuestas apuntan a un empate, va a estar muy reñido y habrá acusaciones de fraude.
Como una ola
En los sondeos electorales hay de todo: triunfos de Massa, triunfos de Milei y empates técnicos. Ligeras ventajas en general para el candidato libertario. Es cierto que las encuestas se equivocaron al predecir que Milei ganaría la primera vuelta, pero la que sí dio como triunfador a Massa —la consultora brasileña Atlas Intel— dice ahora que ganará Milei por más de cuatro puntos (52,1% contra 47,9%).
Es decir, pese a su caótico fichaje por la casta, su errática campaña y su naufragio en el debate electoral, Javier Milei rozaría la presidencia. ¿Qué podemos esperar de él si eso ocurre?
El economista Mariano Fernández, uno de los pocos amigos antiguos de Milei, pero que acabó rompiendo con él, habló en Perfil hace unos días:
"Milei era una persona con algunos problemitas pero no tenía un cargo público…".
"Hoy Macri ejerce influencia sobre Milei. Incluso cambió la impronta de su discurso, que ahora está desinflado y solapado. Siempre tuvo sus exabruptos y su comportamiento histriónico, pero si a eso le sumamos la influencia de grupos religiosos en su campaña, tenemos una caricatura de Trump. Y ahora será una caricatura de Macri", zanjó Fernández.
¿Significa esto que la casta tendría bajo control a un presidente Milei? ¿O es incontrolable por naturaleza? "Aun si Mauricio Macri lograra controlar intelectualmente a Javier Milei y literalmente gobernara sus acciones racionales, conoce perfectamente las dificultades que tiene Milei para que su propia racionalidad gobierne sus emociones", escribió Jorge Fontevecchia en Perfil.
El físico de Murcia al que plagia Milei: "Es todo muy triste"
Carlos Prieto
En efecto, aunque la casta ha limado y reenfocado el discurso de Milei, sus emociones galopan libres en cuanto tiene oportunidad…
Hace unos días, Milei colgó en Instagram un texto desmintiendo las supuestas fake news que circulan sobre él. "Venta de órganos: falso. Venta de niños: falso. Libre portación de armas: falso. Privatización de salud: falso. Privatización de sanidad: falso", arrancaba el documento. ¿De dónde habían salido las propuestas que Milei dice que son falsas? Sí, lo han adivinado: de Milei. Generalmente, de la boca del Milei tertuliano, con tendencia a calentarse y a fantasear con una Argentina en la que él destruía el Estado y daba paso a un oasis libertario a lo Robinson Crusoe (conocido por otros como ley de la jungla).
Pero los desmentidos del político argentino no quedaron ahí: "Milei tiene problemas psicológicos: falso. Milei habla con los perros muertos: falso. Milei se cogió a su hermana: falso".
En efecto, es extraño que, sin que nadie le pregunte, un candidato presidencial niegue haber hecho el amor con su hermana, pero es Javier Milei.
Tuve que ir a chequear porque pensé que era falso. No. Milei realmente subió a Instagram un panfleto que alguien hizo en paint donde desmiente que se coge a la hermana.Esta persona no puede dirigir un país por favor pic.twitter.com/VSAThCTX4T
— Gabriel (@__endut__) November 11, 2023
Más allá de las referencias a su hermana y sus chuchos, si es que se puede ir más allá, otros de sus desmentidos pasaron más desapercibidos, pero están en la raíz de su convulsa campaña electoral: "Milei es casta: falso. Milei es títere de Macri: falso".
A Milei, en definitiva, le escuece que le asocien con la casta y con Macri, pero no tanto como para no aliarse con él por necesidad política. La duda ahora es saber si a Milei le llegará con Macri para ser presidente o estaba mejor pegando tiros en el monte. En la madrugada del domingo al lunes sabremos si Milei solo ha sido un sueño bizarro de una noche de verano o la rave no ha hecho más que empezar.
]]>Carlson fue recibido en Ferraz con honores de estrella, gracias al masivo tirón de su cuenta de Twitter, donde ha entrevistado a Milei, Bolsonaro, Orbán… y próximamente a Santiago Abascal.
Otro chorro de gasolina a la ola de protestas antisanchistas, que en 11 días han caldeado a tope el clima contra la amnistía (logrando lo que el PP llevaba tres meses intentando en vano).
“Me encanta España y están intentando robar vuestro país. Una democracia no debería funcionar así. No puedes dar una amnistía solo para que la gente te vote… Es muy difícil entender lo que pasa en España si no vives aquí. Vuestra política es complicada para un americano. Quiero entenderlo e intentar explicarlo”, contó Carlson a este periódico a su paso por Ferraz.
Popular pero tóxico
Pero la carlsonmanía global tiene algunas fisuras.
El periodista fue liquidado después de que Fox pagara 787 millones de dólares a la empresa de recuento de votos Dominion, acusada en falso —por Fox y el trumpismo— de manipular las elecciones que perdió Donald Trump. La salida de Carlson vino acompañada de acusaciones de toxicidad y misoginia laboral, pero, según algunas fuentes, su cabeza fue parte del acuerdo extrajudicial de Fox con Dominion. O los volantazos de una Fox que no se decide a estar con Trump o contra Trump.
El que sí tiene bastante claro dónde está es Tucker Carlson: en la agitación alt-right… y tratando de reinventarse tras el inesperado varapalo laboral, que le dejó sin sueldo millonario —20 millones de dólares anuales— y sin altavoz de máxima influencia en la política estadounidense, desde el que apoyó incansablemente al trumpismo y criticó a Ucrania tras ser invadida por la Rusia de Putin.
El presentador trata de reinventarse tras el varapalo laboral, que le dejó sin su salario (20 millones de dólares anuales) y sin su altavoz de máxima influencia en la política estadounidense
Ahora que ninguna gran televisión de EEUU se arriesga a fichar a un presentador inmensamente popular, pero visto como tóxico, Carlson se busca la vida en otros medios (Twitter) y otras latitudes (Argentina, Hungría o España).
En efecto, más allá del subidón de la agitación callejera y mirado fríamente, lo que tenemos es a Carlson realizando una gira por provincias tras su defenestración estadounidense, como lo hizo antes otro trumpista de primera hora, Steve Bannon, exestratega jefe del presidente Trump.
En efecto, tras su vertiginoso pero fugaz paso por la Casa Blanca, Bannon inició una gira europea para extender la alt-right por el mundo. La prensa europea se volvió loca a cada paso del gran mandarín del trumpismo, pero el hecho es que el Bannon del tour europeo estaba ya en la cuesta abajo (luego vinieron sus graves problemas con la ley estadounidense).
Una vez más, una parte de España ha recibido con alegría a un americano… con problemas en casa. ¿Recuerdan cuando empezamos a producir las películas de Woody Allen que EEUU no quería producir? España salió al rescate del cineasta apestado (injustamente o no). Cada película “española” de Allen era un acontecimiento en nuestro país. Eso sí, pasada la euforia, todos estamos de acuerdo con que Vicky, Cristina, Barcelona es una castaña comparada con Annie Hall, Zelig o Broadway Danny Rose.
Es importante tener esto en mente para contextualizar la visita de Carlson Tucker a España.
Ahora bien: dentro de su larga decadencia, ¿a Woody Allen no le quedará aún dentro otra obra maestra? Tucker guarda todavía una bala de plata para rehacer su carrera en su país: que Trump sea el candidato republicano en las siguientes elecciones y le nombre uno de sus hombres fuertes.
Mientras tanto, gira triunfal por teatros de provincias.
]]>Nadie conocía a Javier Milei hasta que, hace una década, empezó a ir a platós y tertulias a meter voces contra el Estado en todas sus manifestaciones, del banco central al pobre diablo que vive del subsidio. No es que perdiera los estribos habitualmente, es que nunca los tuvo, era una carreta desbocada, le preguntabas "¿qué tal todo, Javier?" y procedía a llamarte "sorete", "parásito chupasangre" y "zurdo de mierda" con los ojos inyectados en sangre.
Al margen de que el fuego interno le valió para construirse un personaje que hacía audiencia, su magnetismo radicaba en que sus estallidos de cólera parecían más reales que impostados, el tipo pasaba de cero a 100 al menor contratiempo, ya fuera mentar a Keynes sin su permiso, darle los buenos días o la mera rotación terrestre.
En ese contexto volcánico, y dado que el político parecía una ola imparable tras las primarias, alguien decidió que Milei no fuera Milei en los dos debates electorales televisivos, un Milei más, ejem, presidenciable, o al menos uno que no llamara "hija de puta, la concha de tu madre" a nadie en directo, como había hecho tantas veces antes. Viéndose ganador, Milei logró controlar su ira en los debates. Pero controlar un movimiento político que había consistido hasta entonces en un A VER QUIÉN LA DICE MÁS GORDA no era tarea sencilla...
"Javier Milei es un loco, pero es nuestro loco": lo que le espera a Argentina
Carlos Prieto
1) El economista Alberto Benegas Lynch, que habló antes de Milei en el mitin de cierre de campaña, llamó a cortar relaciones con el papa Francisco (sí, achicharrar al jefe argentino de la Iglesia católica no parecía la idea más astuta para captar el voto de la derecha moderada en la segunda vuelta).
2) Lilia Lemoine —conocida como la peluquera de Milei y nueva diputada electa— anunció en campaña un proyecto de ley para “renunciar a la paternidad si te pinchan un preservativo”. Resumiendo: los padres no estarían obligados a financiar la subsistencia de sus hijos menores si, en el momento de su concepción, pasaban de meterse en tinglados familiares. “No me parece justo que un hombre tenga que hacerse cargo económicamente de una criatura hasta los 18 años cuando no lo quiso tener… ¿Por qué los hombres por ley tienen que mantener a una criatura porque quizás les dijeron: 'Sí, sí, acabá [eyacula] adentro que tomo la pastilla' o les pinchan un forro?... Hay muchas mujeres que para enganchar a un tipo hacen estas cosas y se aprovechan del tipo en medio de la calentura”.
La madrugada del lunes, tras conocerse el insuficiente resultado de Milei en la primera vuelta, la malhumorada tuitosfera libertaria argentina la tomó con Lemoine por haberla liado en campaña, activando presuntamente el adormecido voto peronista (¿machismo encubierto para desviar las culpas lejos del líder alfa?).
En resumen: ha bastado un fallo en las expectativas electorales de Milei para que las contradicciones internas acechen a su movimiento, que creció cargando contra la casta y ahora se ve obligado a negociar con ella.
Esto es hablar sin saber. https://t.co/mkPDlMbzRO
— Lilia Lemoine 🍋 (@lilialemoine) October 23, 2023
Escúchame @lilialemoine porque no cerras un poco el orto????? Pareciera que no queres una mierda que gane Milei, no puede ser que seas tan katraska
— Lenchu ☠️ (@Dramaqu3n77) October 23, 2023
¿Al circo de Milei le han crecido los enanos? Un poco, pero ¿es justo echar la culpa a los secundarios? ¿Pedir moderación a los discípulos de Milei no es como pedirle al reguetón que cante contra la promiscuidad sexual?
Aunque es cierto que todo desbarre en campaña puede activar la movilización del rival, sobre todo cuando hoy día uno vota más en contra que a favor de alguien, no lo es menos que Milei se basta y se sobra para aterrorizar a medio país… incluso a los suyos...
El pavor
Casi todos los vídeos con burradas de Milei que circulan por las redes tienen varios años de antigüedad, nada de lo que dijo durante la campaña electoral entraría en su top 10 de disparates, salvo alguna cosa…
Alien vs. Predator: el laboratorio político argentino nos avanza el duelo definitivo
Ángel Villarino
En el segundo debate televisivo, llamó “montonera asesina” a Patricia Bullrich, candidata de la derecha mainstream. No parece muy grave tratándose de Milei, pero seguro que se arrepiente de haberlo dicho: tras ser batido por el peronista Sergio Massa en la primera vuelta, Milei necesita ahora desesperadamente los votos de la “montonera asesina”, convertida, de pronto, en una estadista responsable a la que Milei habla con voz aflautada (no podemos acabar este párrafo sin aportar un brochazo sobre Bullrich, que empezó su vida política en la dirigencia de la guerrilla izquierdista montonera, pasó por todo el arco parlamentario democrático en continua escalada y, cuando pareció que había llegado su momento como candidata conservadora de mano dura, le adelantó Milei por la derecha con tanto estruendo que Bullrich pareció una comeflores en comparación. Quizá Bullrich no se recupere nunca de esta broma histórica del destino).
Pero volvamos a Milei como generador de pavor.
Una encuesta reciente preguntó a los votantes de Milei a qué candidato temían más. Pues bien: el 11,6% dijo que al que más temía era… a Milei.
Encuesta a los votantes de Milei. ¿A qué candidato temen más? El 11,6%… a Milei
"Nos sorprendió el resultado, porque ningún candidato tiene un 10% de sus votantes que le teman, pero eso define muy bien cómo es el voto de Milei: su votante ve todo podrido y quiere una especie de navaja que lo corte todo", explicó el antropólogo Pablo Seman, autor de la encuesta.
Haría falta un ejército de sociólogos y psicoanalistas para explicar por qué uno querría votar a un político al que teme. ¿Es algún tipo de masoquismo enrevesado? ¿Es el nihilismo el estado natural del argentino medio tras décadas comiendo mierda? ¿Estamos deseando tener a un caudillo que nos pegue con una fusta en el culo? ¿De perdidos al río? El caso es que parte del electorado argentino ha optado por el ¡VIVA MILEI! ¡VIVA LA MUERTE!, acojonando a mucho votante peronista (o simplemente votante con miedo a que le quiten lo poco que tiene).
Los 10 mandamientos de Javier Milei, el gurú anarcocapitalista del mundo hispano
Marcos Lema
Porque, vamos a ver, si das miedo a tus propios votantes, ¿cómo no vas a darlo al resto? Por ahí empezó a crecer un peronismo por el que nadie daba un duro tras quedar tercero en las primarias, tras 16 de los últimos 20 años en el poder, con la inflación por las nubes y el país al borde del catacroker.
Uno de los grandes éxitos de la campaña peronista fue aislar a su candidato de la crítica situación económica del país, lo que tiene mérito dado que Sergio Massa es… el ministro de Economía. Hacer pasar a Massa por un tipo que pasaba por ahí rozó lo inverosímil, pero cuando uno tiene en frente a Milei con una motosierra es más fácil que tu público se olvide de las pifias que cometiste antes. Virgencita, virgencita, que me quede como estoy, aunque sea mal.
]]>